Están por todas partes. Aprovechan los lugares más visibles de las avenidas principales para aparecer. Exhiben mensajes como “Adelante, presidente”, "están con Colombia o están con el terrorismo”, otras con mensajes críticos hacia Venezuela y su presidente. Son vallas enormes con mensajes concretos y claros. Todas, con un marcado corte ideológico de apoyo a las actividades del gobierno, perdón, perdón, un marcado apoyo a las declaraciones de Álvaro Uribe Vélez. De hecho, no transcurre mucho tiempo entre una polémica y dura declaración y la instalación de su respectiva valla.
Antes, no se había visto publicidad de este tipo, apoyando a un personaje o alguna acción en concreto. Pero, lo más grave, es que antes, no se había visto publicidad que de modo indirecto alentara a tomar una posición en contra del gobierno o el gobernante de otro país. Porque así puede intuirse de mensajes como el incluido en la foto que acompaña este texto. No es explícito. Pero no hace falta tener más de dos dedos de frente para intuirlo.
¿Qué se pretende con esto? Pregunto. ¿Quién paga esta publicidad? La opinión pública es libre de tomar partido y las personas también están en su derecho de querer apoyar al presidente. Así mismo, quienes lo apoyan también están constitucionalmente avalados para difundir sus ideas. Sin embargo, avisos como el de la foto parecen ir más allá de la toma de partido; más allá de la política nacional.
Todo conflicto, hemos de recordar, requiere de una opinión pública que lo aliente. De ahí que las críticas, sátiras e insultos que se emiten – de modo indirecto – contra los gobiernos vecinos a través de estas vallas, y esas – más directas – que se pronuncian en las ya famosas marchas y manifestaciones mensuales, también en contra de los gobiernos vecinos, no hacen más que calentar a la opinión pública, alentarla a un conflicto. ¿Qué necesidad tenemos de eso?
Más vale, entonces, que los colombianos nos ocupemos de nuestros asuntos y, mientras nadie irrumpa en ellos, dejemos a los demás tranquilos solucionando sus problemas. Pues ya bastante ropa sucia tenemos para lavar en casa.
Eso sí, me gustaría conocer quién paga esta publicidad y cuáles son sus razones para ello.
4 comentarios:
Será que ahora es prohibido pensar?, acaso uno no puede terner una posición en la no esté de acuerdo con ninguno? Esto cada vez se parece más a una dictadura, en las dictaduras uno no puede hablar en contra del gobierno porque lo tildan de antipatriota, Yo estoy por una Colombia en paz, una Colombia libre, una Colombia donde se pueda opinar, una Colombia donde no haya narcotrafico ni guerrilla, una Colombia donde el gobierno deje expresesarse, una Colombia feliz.
J.P.A.
Muy peligroso eso. Lo que se ve claramente es la intención de polarizar, aún más, a la opinión colombiana. Es la lógica que se está instalando en este país que proclama que sólo la opción uribista es válida y que cualquier disenso es terrorismo.
Saludos.
Muy buen artículo, GABO, que ayuda a construír una opinión crítica e independiente y a mirar los hechos desde diferentes puntos de vista y no solo en blanco y negro, con una visión maniqueísta de la política, donde solo el uribismo y su sospechosa seguridad democrática (más bien seguridad para los grandes inversionistas y no seguridad para las clases populares)es "el bien" y las demás corrientes de opinión son "el mal". Podemos los colombianos, y con mayor razón los países vecinos, no estar de acuerdo con la "cruzada uribista", pero eso no quiere decir que seamos amigos del terrorismo.
GOPE.
18 de abril de 2008.
Excelente apunte, con todo y foto, estamos pasando por una dictadura solapada disfrazada de oveja, con un presidente disfrazado de monaguillo. Me gusta este blog.
De apso una cuña: el Lunes 28 de Abril sale el nuevo episodio Cauchola (con repetición Mieerc.30 de Abril 9:30 pm.). Gracias por el apoyo.
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